El almacenamiento de gas en España: ¿dónde se encuentra?

En España, el gas natural es una fuente de energía muy utilizada en el sector industrial y doméstico. Sin embargo, para garantizar su suministro y disponibilidad, es necesario contar con un sistema de almacenamiento eficiente y seguro. En este artículo, te mostraremos dónde se encuentran los principales almacenamientos de gas en España y cómo funcionan, para que puedas conocer más sobre este recurso energético clave en nuestra sociedad. ¡Sigue leyendo!

Dónde se almacena el gas en España

El gas es uno de los recursos energéticos más importantes para el funcionamiento de una sociedad moderna. En España, el gas se almacena en diferentes tipos de instalaciones, según su finalidad y el tipo de gas que se trate.

La mayoría del gas que se consume en España proviene del extranjero, principalmente de Argelia y de países de la Unión Europea. Para garantizar el suministro, se han construido diferentes infraestructuras de almacenamiento en el territorio español.

Una de las instalaciones más importantes es el almacenamiento subterráneo de gas natural en Castellón, que cuenta con una capacidad de más de 1.300 millones de metros cúbicos. También destaca el almacenamiento de gas natural licuado (GNL) en Huelva, que cuenta con una capacidad de 1.000 millones de metros cúbicos.

Otras instalaciones relevantes son los depósitos de gas en la costa mediterránea, como el de Cartagena, y las plantas de regasificación de GNL, como la de Barcelona o la de Bilbao.

En definitiva, España cuenta con una amplia variedad de infraestructuras de almacenamiento de gas que garantizan el suministro a la población y a la industria. Además, se están llevando a cabo diferentes proyectos para ampliar y mejorar estas instalaciones, con el objetivo de hacerlas más eficientes y sostenibles.

Dónde se almacena el gas

En España, el gas natural se almacena en diferentes tipos de instalaciones, dependiendo de su uso y capacidad.

En primer lugar, se encuentra el almacenamiento subterráneo de gas natural (ASGN), que consiste en la utilización de antiguos yacimientos de hidrocarburos para almacenar gas. En España, existen cuatro ASGN: dos en Cataluña (Amposta y Juseu), uno en Aragón (Yela) y otro en Castilla-La Mancha (Serrablo).

Otra opción es el almacenamiento en instalaciones en superficie, como los depósitos de gas. Estos pueden ser de diferentes tamaños y se utilizan para abastecer a pequeñas comunidades o a industrias en zonas rurales. También existen terminales de gas natural licuado (GNL), que son instalaciones industriales que permiten la recepción de gas natural en forma líquida, su regasificación y su posterior distribución a través de la red de gasoductos.

Por último, cabe mencionar la opción de almacenamiento en buques de GNL, que se utilizan para transportar gas natural licuado desde otros países productores hasta España, donde se regasifica y se distribuye a través de la red de gasoductos.

Cuánto gas tiene España almacenado

El almacenamiento de gas en España es una cuestión de vital importancia para garantizar el suministro energético del país. Actualmente, España cuenta con una capacidad de almacenamiento de gas natural de 13.200 millones de metros cúbicos, distribuida en diferentes instalaciones ubicadas en distintos puntos del territorio nacional.

Según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a fecha de 30 de septiembre de 2021, España tenía almacenados 23.986 GWh de gas natural. Esta cifra supone un 69,4% de la capacidad total de almacenamiento disponible.

El almacenamiento de gas natural se realiza en dos tipos de infraestructuras: los almacenamientos subterráneos y los almacenamientos en superficie. Los primeros se encuentran en antiguos yacimientos de gas, mientras que los segundos se utilizan para almacenar gas licuado a baja temperatura.

Los principales almacenamientos subterráneos de gas natural en España se encuentran en los siguientes lugares:

• Campo de gas de Tordellego (Burgos)
• Yacimiento de gas de Gaviota (Vizcaya)
• Campo de gas de La Marañosa (Toledo)
• Campo de gas de Serrablo (Huesca)

Por otro lado, los principales almacenamientos en superficie se encuentran en los siguientes lugares:

• Terminal de regasificación de Bahía de Bizkaia Gas (Vizcaya)
• Terminal de regasificación de Barcelona (Barcelona)
• Terminal de regasificación de Cartagena (Murcia)
• Terminal de regasificación de Huelva (Huelva)

En España, el almacenamiento de gas es esencial para garantizar el suministro energético en momentos de alta demanda. En este sentido, existen varias instalaciones estratégicas en todo el país que permiten almacenar gas y distribuirlo de manera eficiente. Entre ellas, destacan los depósitos subterráneos, ubicados en zonas como Serrablo (Huesca) o Yela (Guadalajara), y los almacenes en superficie, como el de La Robla (León) o el de Gaviota (Barcelona). Además, España cuenta con una amplia red de gasoductos que conecta estas instalaciones con las principales ciudades y centros industriales del país. En definitiva, el almacenamiento de gas es una pieza clave en el sistema energético español y su adecuada gestión es fundamental para garantizar la estabilidad y seguridad del suministro.